Escuela de Padres
Grupo de Estudios de Actualidad
ESCUELA DE PADRES
Próxima Charla/Debate
21 de marzo de 2018
10:00 – 12:00 h
Charla: “Desarrollo de las manifestaciones de la personalidad del alumnado. Prejuicios y valores”
12:00 h
Pausa / Café
12:15 – 13:15 h
Charla: “Patología del acoso escolar. Casos clínicos”
13:15 – 14:00 h
Charla: “Herramientas para hacer frente a los retos que plantea el acoso escolar”
Fernando Lojo Fritschi | Psiquiatra
Juan Miguel Molina | Coordinador ESCUELA DE PADRES. Grupo Estudios Actualidad
Centro Cultural Las Claras | Fundación CAJAMURCIA
• Dale todo lo que te pida. Así crecerá convencido de que las cosas se consiguen sin esfuerzo.
• Recoge lo que él deja tirado: libros, zapatos, ropa, juguetes. Así se acostumbrará a cargar sus obligaciones sobre los demás.
• No le regañes ni le corrijas lo que hace mal para que no se frustre, más no olvides que después serás tú el frustrado.
• No estés pendiente de sus rabietas. Aprenderá a no salirse siempre con la suya, a que todas las acciones tienen su límite.
Cuando existe un exceso de permisividad, el niño puede llegar a ser un pequeño “tirano” que intenta dominar incluso a los adultos ocupados de su educación.
“SIN CORRECIÓN NO HAY EDUCACIÓN”.
• Si no cuida desde temprana edad las actitudes cívicas más elementales (Saludar, despedirse, pedir perdón, dar las gracias), ni sus modales. Acabará siendo un individuo aislado socialmente.
• No le fijes horarios, normas ni reglas en casa. Así conseguirás que sea un irresponsable.
• Si no tolera, ni respeta las situaciones, actitudes o comportamientos de sus hermanos, compañeros y amigos, es
probable que acabe siendo un intolerante.
• Déjale que imponga sus criterios y caprichos en sus juegos, que no comparta con nadie sus pertenencias, es el mejor camino para hacerle un egoísta.
• No delegues ni le encargues tareas en casa (poner y quitar la mesa, comprar el pan, ayudar a sus hermanos). Es una buena forma de hacerlo insolidario.
Frente al acoso escolar, TOLERANCIA CERO. Por dignidad y por justicia defendemos a la víctima.